Cada cabello tiene un ciclo de crecimiento y desarrollo continuo que se inicia con la aparición de un nuevo cabello y finaliza con la caída del mismo. En consecuencia, de forma natural, cada cabello va a caer en algún momento de su desarrollo, dando lugar al crecimiento de un nuevo cabello.
Según estudios científicos y análisis clínicos, lo normal es que caigan entre 50 y 150 cabellos cada día. Es cuando se altera el equilibrio natural de crecimiento y desarrollo de la totalidad de los cabellos, que incrementa el número de cabellos que finalizan su desarrollo y por tanto caen, disminuye la densidad capilar y progresivamente se instaura la alopecia (calvicie).

Debemos preocuparnos si percibimos un aumento sostenido en la cantidad de cabellos que perdemos a diario. Ante esta situación, debemos aplicar un tratamiento efectivo que detenga la caída del cabello, y así evitar la pérdida progresiva de la densidad del cabello y la futura aparición de alopecia.

Aunque el aspecto que observamos en nuestro cabello corresponde a la totalidad del cabello, hemos de valorar que cada cabello tiene su propio ciclo vital de crecimiento y desarrollo. Cada cabello se desarrolla en tres fases cíclicas:

Fase de crecimiento: corresponde a la fase más larga de cada cabello y representa el período de desarrollo a partir de la raíz y de crecimiento de la largura del cabello. Dura entre 2 y 5 años, tiempo durante el que el cabello crece un promedio de 1 centímetro al mes. Normalmente el 80% de los cabellos están en esta fase.

Fase de transición: Se sucede cuando el cabello finaliza su desarrollo. Dura unos 14 días, durante los que la raíz del cabello se retrae y disminuye de tamaño. Al finalizar esta fase el cabello se desprende y se cae.

Fase de reposo: el folículo piloso no contiene cabello porque se ha desprendido en la fase anterior. Representa una fase de regeneración para que se desarrolle un nuevo cabello dentro del folículo piloso, que iniciará la fase de crecimiento. Esta fase dura hasta 3 meses, y aproximadamente el 20% de los cabellos se encuentran en esta fase. En una situación normal y equilibrada, tras el tiempo de reposo se desarrollará un nuevo cabello.

Así, en la totalidad del cabello, cada unidad tiene su propia fase de desarrollo y en una situación equilibrada son más los cabellos que están activos que los que están en reposo o en caída.

Los factores de crecimiento son sustancias de origen proteínico que regulan el ciclo de desarrollo de los folículos pilosos (unidad básica del cabello).
Estos son producidos normalmente por el organismo y circulan a través de la sangre. Cuando se produce un aumento anormal de la caída del cabello, aplicar factores de crecimiento sobre el cuero cabelludo estimula la renovación y crecimiento del cabello, prolonga la fase de desarrollo, e inhibe la degradación de la base del folículo piloso. Con ello, se alarga la vida media del cabello y se detiene su caída.